OSUNA: UN TESORO POR DESCUBRIR.

Nuestro recorrido comenzó en “La Colegiata”, con sus magníficos lienzos de José de Ribera, sus esculturas de Juan de Mesa, Martínez Montañés y Alonso Cano, el plateresco de su Patio del Panteón, la riqueza de su museo, la belleza de su capilla del Santo Sepulcro recientemente restaurada, la sobriedad de su fachada exterior y…para completar el cuadro…una peculiar guía, Rosario Rivera, “Riverita” para los antiguos del pueblo, que con espontaneidad, desparpajo y autoridad, no exenta de gracia, iba instruyéndonos, mientras recorríamos las distintas estancias de este imponente edificio del que nos contó su historia y sus leyendas, nos hizo comparaciones de la calidad de sus obras en relación a las que poseen otros museos o instituciones de otras ciudades, Sevilla, fundamentalmente, y también compartió con nosotros, porque “le habíamos caído muy bien”, algún chismorreo de actualidad, nos tocó “Noche de paz” en un órgano realejo del siglo XVI, y nos vendió lotería del “Niño”. Todo un personaje esta guía y custodio del mayor tesoro de Osuna.

Completaron nuestra visita el interesante Museo Arqueológico, el Monasterio de la Encarnación y un paseo por las calles de la villa, especialmente por la de San Pedro, con su importante concentración de casas palacios, como la del Marqués de la Gomera o la Cilla del Cabildo Colegial, también admiramos otros edificios del barroco por otras calles, como la fachada del palacio de los Cepeda o la torre de la Merced, con ese barroco de “ida y vuelta”, como algunos palos del flamenco, que volvían enriquecidos por la influencia de cantes populares americanos. En definitiva, un recorrido muy interesante y muy recomendable.

A nosotros, quien nos movió a organizar esta visita fue Curro Rodríguez, el marido de Lola Montero, la pintora que presenta durante estos días, en el Museo de Osuna, una preciosa exposición: “Reflexión y recorrido personal”, un recorrido intimista por los últimos diez años de la obra de la artista, en el que también se evocan, a través de algunos de sus óleos, recuerdos adolescentes vividos en calles y plazas de Osuna. Esta muestra es otro gran atractivo para visitar la ciudad (hasta el 5/1/2014). La imagen que encabeza esta reseña es una de las obras expuestas.

En el capítulo de agradecimientos, además de a Lola Montero y a Curro Rodríguez, tenemos que incluir a Lorenzo Cascajosa, director del Museo Arqueológico y gerente de la asociación empresarial Asociación Turística Sevilla Campiña-Sierra Sur, que nos acompañó y guio por las calles de Osuna, que nos facilitó en todo momento la visita y que gestionó la reserva del restaurante de la bonita Hospedería del Monasterio. Me parece muy interesante la iniciativa de esta asociación, la recomiendo para cualquier grupo que quiera organizar una visita a Osuna (info@alsurdesevilla.es). Estoy convencido que si avanza siendo más proactiva (fuimos nosotros los que llegamos a ella, a través del ayuntamiento, no ella a nosotros que, como asociación cultural inscrita en todos los registros, somos claros “clientes potenciales”), y contando con ese magnífico “producto” y la amabilidad que tienen para mostrarlo, podrán conseguir que las cifras del turismo de Osuna crezca de manera significativa.